La resistencia de las plagas a los insecticidas químicos es un problema creciente en la agricultura española. El uso excesivo y repetitivo de productos químicos ha provocado la evolución de insectos resistentes, lo que reduce la efectividad de los tratamientos convencionales y aumenta las pérdidas económicas. Este fenómeno no solo afecta la productividad, sino que también tiene un impacto negativo en la biodiversidad y en la calidad del suelo y el agua.
Para hacer frente a este desafío, cada vez más agricultores buscan alternativas sostenibles como el Biocontrol para Resistencia a Plagas. Esta estrategia consiste en el uso de organismos vivos, como hongos entomopatógenos, para controlar de manera natural las poblaciones de insectos. Entre las opciones más efectivas destacan el Metarhizium y la Beauveria bassiana, dos biocontroladores que pueden reemplazar o complementar los insecticidas químicos sin afectar el medio ambiente.
El Biocontrol para Resistencia a Plagas no solo ayuda a mitigar el problema de la resistencia, sino que también contribuye a un modelo de agricultura regenerativa y sostenible.
En este artículo, exploraremos cómo estas soluciones pueden integrarse en la gestión de plagas y por qué representan una alternativa viable para los agricultores que buscan reducir su dependencia de productos químicos.
¿Por qué las plagas se vuelven resistentes a los insecticidas?
El uso excesivo y repetitivo de insecticidas químicos ha provocado una selección natural de los insectos más resistentes. Con cada generación, los individuos que sobreviven a los tratamientos transmiten su resistencia a la descendencia, lo que reduce la efectividad de los productos convencionales. Este fenómeno se ha observado en plagas comunes en España, como:
- Pulgón verde (Myzus persicae) en cultivos hortícolas.
- Mosca blanca (Bemisia tabaci) en invernaderos.
- Trips (Frankliniella occidentalis) en pimientos y tomates.
- Gusano del alambre (Agriotes spp.) en cultivos de patata y maíz.
- Carpocapsa (Cydia pomonella) en frutales.
Mecanismos de resistencia en las plagas
Las plagas pueden desarrollar diferentes mecanismos para resistir el efecto de los insecticidas, entre ellos:
- Resistencia metabólica: Algunos insectos producen enzimas que descomponen el insecticida antes de que pueda hacer efecto.
- Resistencia por modificación del sitio de acción: Cambios en la estructura de las proteínas diana impiden que el insecticida actúe correctamente.
- Resistencia por disminución de la penetración: Algunas plagas desarrollan cutículas más gruesas o impermeables que reducen la absorción del insecticida.
- Resistencia por aumento en la excreción: Los insectos pueden eliminar los compuestos tóxicos de su organismo con mayor rapidez.
- Comportamiento evasivo: Algunas plagas han modificado su comportamiento para evitar el contacto con los insecticidas, por ejemplo, alimentándose en horarios en los que no se aplican tratamientos.
Factores que aceleran la resistencia a insecticidas
- Uso repetitivo del mismo principio activo sin rotación con otros métodos de control.
- Aplicaciones en dosis inadecuadas, lo que no elimina completamente la población de plagas.
- Poca diversificación en estrategias de manejo, confiando únicamente en los químicos.
- Falta de monitoreo adecuado, lo que impide detectar la aparición de individuos resistentes a tiempo.
- Presión de selección en monocultivos, que favorece la propagación de insectos con mayor tolerancia a los tratamientos.
- Uso de insecticidas de amplio espectro, que eliminan también a los enemigos naturales de las plagas, dejándolas sin control biológico natural.
Dado este contexto, es crucial buscar estrategias alternativas para el manejo de plagas, como el control biológico con hongos entomopatógenos, que ofrecen una solución sostenible y eficaz.

Alternativas ecológicas para el control de plagas
Para combatir la resistencia de las plagas sin afectar el medio ambiente, cada vez más agricultores apuestan por estrategias basadas en el control biológico. Entre ellas, el uso de hongos entomopatógenos como Metarhizium robertsii y Beauveria bassiana se ha demostrado altamente eficaz. Estos microorganismos infectan y eliminan a los insectos plaga sin dañar a los organismos beneficiosos ni contaminar el suelo o el agua.
Metarhizium robertsii: La clave para el biocontrol sostenible
Metarhizium robertsii, es un hongo entomopatógeno que ataca a una amplia variedad de insectos plaga mediante un mecanismo de infección natural. Este hongo penetra la cutícula del insecto, se reproduce en su interior y acaba con él en pocos días.
Ventajas del uso de Metarhizium:
- Eficaz contra larvas de escarabajos, saltamontes, orugas y otros insectos resistentes.
- No genera resistencia en las plagas.
- Compatible con otros métodos de control biológico.
- Seguro para el medio ambiente y los polinizadores.
- Permite reducir el uso de insecticidas químicos en los cultivos.
Beauveria bassiana: Otro aliado en el control biológico
Junto con Metarhizium , la Beauveria bassiana es otro hongo entomopatógeno utilizado en la agricultura para el control de insectos resistentes. Este hongo infecta a insectos como moscas blancas, trips y gorgojos, causando su muerte por deshidratación y parálisis.
Beneficios de Beauveria bassiana:
- Ataca insectos plaga sin afectar organismos benéficos.
- Ideal para cultivos hortícolas y frutales.
- Efectivo en invernaderos y cultivos al aire libre.
- Reduce la dependencia de insecticidas químicos.

Implementación del biocontrol en la agricultura
Para lograr un control efectivo de plagas resistentes sin comprometer la productividad, es clave integrar el uso de hongos entomopatógenos en un manejo integrado de plagas (MIP). Esto implica:
- Monitoreo constante de la presencia de plagas y su nivel de infestación.
- Uso estratégico de biocontroladores, como Metarhizium y Beauveria bassiana, aplicándolos en los momentos adecuados del ciclo del cultivo.
- Diversificación de métodos de control, incluyendo el uso de trampas, rotación de cultivos y mejora de la biodiversidad del entorno agrícola.
- Aplicaciones combinadas con otros biofertilizantes de Nostoc Biotech para fortalecer la salud del suelo y mejorar la resistencia de los cultivos.
Conclusión
El control de plagas resistentes a insecticidas es uno de los mayores desafíos para la agricultura moderna. La dependencia exclusiva de productos químicos ha llevado a la aparición de insectos cada vez más difíciles de erradicar. Sin embargo, el uso de hongos entomopatógenos como Metarhizium robertsii y Beauveria bassiana ofrece una alternativa eficaz y sostenible.
Al incorporar estas soluciones de biocontrol en un manejo integrado de plagas, los agricultores pueden reducir el impacto ambiental de sus prácticas y mejorar la rentabilidad de sus cultivos. Con el respaldo de empresas especializadas como Nostoc Biotech, la transición hacia una agricultura más ecológica y eficiente es más accesible que nunca.